En la década de los 80 en Chile un canal nacional sacó a la parrilla televisiva la primera teleserie nacional, fue todo un hito y aún hoy es recordada por quienes la vieron y vivieron ese fenómeno, se llama “La madrastra”, yo era un pendejo, así que no la ví, pero mi abuela no se la perdía, y a veces cuando estaba con ella hacia zapping viendo algunas escenas.
El fenómeno interesante era que la gente de la época no podía diferenciar la fantasía de la realidad, para el espectador lo que veía en la pantalla era real, literalmente real, al punto que los villanos de la pantalla eran encarados y perseguidos en las calles y se les recriminaba sus acciones, “que como podía ser tan malo con periquita” los abucheaban y los insultaban en la calle, el público nacional de la época, no podía diferenciar, ni entender que se trataba de un actor, que el actor tenia una vida que no era su personaje y que el drama que ellos estaban viendo era una fantasía.
Este ejemplo ilustra lo que es la consciencia social de una época, de como algo que es absolutamente evidente no es obvio, hasta que se vuelve obvio y pasa a ser evidente, parece una contradicción o una tautología, pero es un fenómeno sumamente real; muchas veces las cosas evidentes en todo ámbito de la vida no las vemos, están ahí pegándonos en la cara y somos incapaces de verlas, hasta que nos damos cuenta de lo obvio y es como si te pegara un rayo, uno dice, ¿como no lo vi antes?, cuando pasa a ser obvio, se produce un cambio en la mirada de las cosas, y como en el ejemplo de “La madrastra” en cierta forma cambia la percepción del mundo y cuando eso cambia lo que pasa es que hay un cambio de consciencia.
El mismo fenómeno se dio años después en la década del 2000, cuando se iniciaron los realitys shows, aun cuando las personas eran reales y sus dramas eran o parecían reales, se empezó a producir un pauteo y una dirección de los eventos, yo nunca vi esos programas, salvo cuando estaba en compañía de una de mis ex, asidua a estos programas y ella, que le gustaba la cinematografía y hacer guiones e historias me iba comentando espantada lo que ella veía muy obvio, el pauteo y la dirección de personas que parecían ser reales, pero muy solapadamente estaban siguiendo un guión, yo solo escuchaba sus comentarios sin seguir, ni entender mucho, ya que no estaba poniendo atención a lo que ocurría en la pantalla, porque no me interesaba, pero ella saltaba de su asiento para declamar lo obvio de la manipulación colectiva y de cómo la gente no veía y no entendía este proceso y me lo explicó un par de veces.
Hay un símil entre los dos sucesos televisivos pero este proceso no es tan obvio y no toda la gente lo ve así, el primero es evidente y obvio el segundo no tanto, o simplemente no es obvio ni evidente o puede que no ocurra en todos los casos, no lo sé.
Pongamos otro ejemplo, la educación, en Chile es un tema que hasta cansa, pero antes de las protestas masivas del 2011, nadie hablaba del tema, ni existía consciencia de que existía un problema, el sistema funcionaba y nadie tenía problemas con eso, el proceso educativo en Chile era un proceso cotidiano y evidente, pero cuestionarse que el dinero del Estado iba a parar en parte a financiar la educación privada y que por esta desviación de recursos la educación publica era cada ves de peor calidad no era obvio.
Aun hoy este tema no es obvio, mi hermana hoy me comento que había hecho un comentario en Facebook, diciendo que no era tan mala la reforma porque en la educación privada subvencionada, los padres ya no tendrían que pagar y ese gasto lo asumiría el Estado.
Entonces, yo que no estoy al tanto de la reforma, pero he leído algunas columnas de opinión, le dije: el tema es que los recursos públicos del Estado tienen que financiar directamente la educación pública que es responsabilidad del Estado, asegurar una educación pública, gratuita y de calidad, ¿Por qué el Estado desvía fondos para financiar la educación escolar y la universitaria que pertenece a los privados y que es de su responsabilidad? ¿Por qué? Si la gente quiere educación privada, y esta educación es pagada por los particulares y tienen dueños privados, porque sus dueños no se hacen completamente responsables de costear su negocio y el Estado tiene que pagar y poner plata ahí, si es privada, ¿Por qué la plata del Estado se invierte y se desvía a los privados cuando la finalidad era asegurar que la mala educación pública mejore y para eso el Estado tiene la responsabilidad de utilizar todos sus recursos para que la mala educación pública mejore y sea de calidad y gratuita? Es un sinsentido.
Se confunde lo público con lo privado, la educación cumple una función social, y esta función social tiene carácter público, pero toda escuela fundada privadamente es un negocio privado, que tiene dueños privados, la única educación pública es la que es de única responsabilidad del Estado y esta confusión, no era y aun no es muy obvia para gran parte del país.
Se confunde lo público con lo privado, la educación cumple una función social, y esta función social tiene carácter público, pero toda escuela fundada privadamente es un negocio privado, que tiene dueños privados, la única educación pública es la que es de única responsabilidad del Estado y esta confusión, no era y aun no es muy obvia para gran parte del país.
Entonces aquí pasan dos cosas, la primera es que uno repite como loro el slogan de educación pública, gratuita y de calidad y ni siquiera piensa en que significan esas palabras que uno ya repite automáticamente.
La educación privada no es publica, es privada, parece obvio pero no es evidente, y esto crea un sinsentido que no es obvio, una contradicción que gracias a las marchas del 2011 en adelante se ha vuelto lenta y paulatinamente más obvio, la educación es un bien social, afecta a todo el país y a cada uno de sus habitantes, en ese sentido es pública, porque es un bien social, pero técnicamente la única educación que es pública es la que otorga el Estado directamente y de la cual el Estado es responsable directamente, toda escuela y universidad que no sea de dominio y propiedad del Estado es privada, y la educación que esas empresas imparten no es publica, es privada.
Entonces como el eslogan de educación publica, gratuita y de calidad, incluye el termino público, lo que es evidente no es obvio, que este eslogan no incluye a los establecimientos particulares subvencionados por el Estado, ni a las universidades privadas, parece obvio pero no lo es y esta confusión y esta falta de claridad en estos simples conceptos implican un tema de consciencia, consciencia social, tan evidente, pero tan poco obvio como lo fue en su tiempo la teleserie “La Madrasta”.
Si la gente no quiere a sus hijos en los colegios públicos es porque la educación que dan estos es de mala calidad y es de mala calidad porque los fondos del Estado no se ocupan plenamente en los establecimientos públicos sino que se desvían en gran medida a establecimientos privados, con el tiempo los colegios públicos son cada vez más malos, aumenta el número de colegios privados y el estado desvía cada vez mas recursos a cada nuevo establecimiento privado y la educación publica pierde y pierde calidad, entonces se produce un círculo vicioso.
Obvio, no. Evidente, no. ¿Cómo pasamos a ver esto de forma más obvia y evidente?. Porque los estudiantes protestaron, lo mismo pasa con las AFP, lo mismo pasa con la clase política y la crisis de representatividad, el tema importante aquí y no me voy a alargar con estos otros ejemplos, es que en todos los casos de la vida desde los más simples a los más complejos, cuando uno toma consciencia de que tiene un problema y logra ver lo obvio de ese problema, ya no puede ser manipulado por el problema, por el circulo vicioso que se repite una y otra vez porque no nos damos cuenta del problema; romper con la manipulación de ese circulo vicioso y cambiar de rumbo implica un acto de consciencia, cuesta, es un proceso que hay que reforzar, hasta que sea absolutamente obvio, pero el efecto es que uno en ese estado deja de ser objeto de manipulación, como lo que le sucedía a la gente cuando le gritaba disparates en la calle a los villanos de “la Madrastra” y esto es un problema de consciencia, ya no privada, ni individual, sino colectiva, consciencia social.
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