domingo, 4 de febrero de 2018

(EL VIAJE A LA SEMILLA) CONVERSACION IMAGINARIA CON UN AMIGO CIENTIFICO SOBRE ESPIRITUALIDAD

No es fácil tocar el tema, nos conocemos desde chicos y se de sobra que te hiciste ateo muy chico, yo también era ateo, pero siempre fui ateo, nací ateo, me crié ateo, porque nunca me inculcaron ninguna religión, así como tampoco me dijeron que dios no existía o que las religiones eran malas, para mí el tema no existía, siempre me fue neutro, mi neutralidad implicó que al entrar en un colegio católico, después de haber pasado por 4 colegios públicos distintos antes, nos conocimos en sexto básico, ósea a los 11 años y fue a partir de ahí que mi neutralidad empezó a mutar hacia el ateísmo, fue mi reacción rebelde ante la ritualidad y la fe que nos imponían, la que fue creando mi aversión, incomodidad al principio, sentirme ajeno a todo el ambiente parroquial, y verificar que no estaba solo en esto viendo a los demás, ya después fue un juicio histórico contra la iglesia, a los 15 o 16 teníamos debates sobre la existencia del alma y los dos coincidimos en que no existía dios, que era un invento una fábula, un mito creado por el hombre y que no había forma de demostrar que existía el alma, quizás estuvimos completamente de acuerdo en esto a los 17.

Pero yo no sé, nunca te pregunte si te inculcaron la fe desde chico, solo sé que la muerte de tu abuela te produjo un sisma, fue un shock, algo que te marcò y que al día de hoy todavía no resuelves, no sé si tenías fe y la perdiste por la perdida, o si como en mi caso nunca tuviste una fe pre inculcada, pre programada.

Han pasado 30 años desde entonces y hoy claramente estamos en bandos opuestos, somos una contradicción, en realidad siempre fuimos una contradicción, nunca estábamos de acuerdo, aunque las diferencias estaban en el punto de vista sobre algún hecho, coincidíamos en una idea, pero no estábamos de acuerdo con su interpretación y por tanto con el resultado, siempre resolvíamos nuestras contradicciones y diferencias llegando a algún punto de acuerdo común, y avanzábamos y cada vez que avanzábamos volvíamos a estar en polos opuestos, muchas veces pasó que yo defendía posiciones que tu habías abandonado y tu tomabas las que yo había dejado atrás, mutadas claramente, reformuladas, pero avanzábamos como una unidad dialéctica, nuestra amistad siempre fue materialista dialéctica y fue espontanea, ninguno de los dos le puso ese nombre, ni sabíamos siquiera que era una unidad dialéctica o el materialismo dialéctico.

Pero yo aún siendo ateo tenia concepciones extrañas, a los 15 me dije que la verdadera riqueza era la sabiduría y que el peor escenario y la más grande tragedia era llegar a ser anciano y en algún punto de la ancianidad encontrar la sabiduría y no tener tiempo para vivir una vida guiada por la sabiduría, morir siendo al final sabio me parecía una tragedia de proporciones, una idea cruzo por mi mente, quiero ser sabio de joven para tener tiempo de tomar decisiones sabias en lo que me quede de vida y tuve esta idea y no me la cuestioné, ahí se quedó y mi vida siguió como si esa idea no existiera, no me atormento, ni me guio, solo fue una idea que tuve en la infancia y seguí jugando.

Pero esa idea estaba conectada a otra, si me muero nada de lo material que consiga en la vida me lo voy a llevar, lo material se queda en este mundo, ¿que es lo único que me puedo llevar conmigo?, lo que aprenda de la vida, fueron como dos ideas simultaneas en el tiempo, la vida es una oportunidad de aprender y solo las experiencias, los triunfos y los fracasaos nos enseñan, en ese tiempo la idea no estaba bien elaborada ni tenía más contenido que, yo vine a este mundo a aprender y lo que aprenda es lo único que me voy a llevar cuando me muera, por tanto lo único que tiene real valor es aprender, tener experiencias, ganar o perder, no importaba, amar, desamar, sufrir, llorar, reír, vivir.

Y a los 15 de noche en el patio mirando las estrellas, me imaginaba que tenía una conversación conmigo mismo, con el yo que sería en algún futuro no muy lejano, en esa época a los 15, 20 o 30 años son una eternidad, pero me mande un recado a mi yo del futuro, no recuerdo que me dije, solo recuerdo esa imagen.

Así que aun coincidiendo en el ateísmo yo tenía fe, porque si lo material no tenía valor y la sabiduría era una finalidad utópica deseada con un sentido práctico y útil, en la semilla de mi ateísmo y sin darme cuenta estaba reconociendo que había una vida más allá de esta, en la que estamos ahora, nunca me cuestionè  esta contradicción, porque fue algo muy inconsciente, una idea poderosa que estaba almacenada como en una inmensa librería, un grueso tomo que se llenó de polvo y fue olvidado, pasando desapercibido dentro de la lógica y la racionalidad que se imponían como la fuerza motriz de nuestra consciencia y que nos llevó a los dos a declararnos ateos a los 17.

Y solucionado y saldado ese tema, teníamos una conclusión y la vida siguió y nunca más tocamos el tema, pasaron los años de universidad y en esa época estábamos felices de haber pasado a otros temas durante ese periodo, viviendo, sin cuestionarnos nada, nada que no fuera lógico o racional, siempre contradiciéndonos dialécticamente, entre fiesta y fiesta y nuestros líos con nuestras pololas (*parejas), y ya para el 2000 te fuiste por 10 años al extranjero, ya en ese momento, en los dos años previos, yo había leído las obras completas de Marx y Engels, incluyendo los tres tomos del capital, y discutíamos sobre los avances en este estudio, queríamos hacer un modelo, un programa computacional con ecuaciones predictivas, porque habíamos concluido que lo que le faltaba al marxismo eran las matemáticas y ecuaciones básicas, que si tenían los economistas capitalistas, pero al final cuando tú te fuiste, después de estar obsesionado con este estudio por 2 años, resumiendo, esquematizando, digiriendo, analizando, discutiendo, y conjuntamente con terminar mi carrera, yo simplemente colapsé, me volví loco.

Y hasta el día de hoy no hemos hablado de espiritualidad más que fugazmente, tu desde un ateísmo pétreo y yo desde la otra trinchera, desde la magia, desde la fe, sin militar con ninguna religión del mundo, ni pretendiendo crear una nueva, mis opiniones siempre te han parecido esotéricas, peligrosas y a parte de la crítica fugaz, que siempre deja ver no solo escepticismo sino cierto grado de ridiculización del tema, nunca hemos vuelto a tocar el tema seriamente.

Tú encontraste tu fe en la ciencia, la lógica y la razón, lo material, cómo funcionan las cosas, por algo te hiciste ingeniero, yo te propongo el viaje a la semilla, ya que estamos en contradicción nuevamente.

Así que pasaron 10 años y cuando volviste, en estos últimos 7 años desde tu regreso, nunca hemos vuelto al origen, seriamente, ya que para ti el tema es ridículo, de hecho el marxismo dejo de ser tema también para nosotros y en eso coincidimos, no, yo quiero volver a la semilla, no a lo que vino después y solo puedo hacerlo buscando lo que tenemos en común, así que te voy a hablar desde la ciencia, porque es el único punto en común que tenemos, todo lo demás es diferente y estamos en lados y en trincheras opuestas, en contradicción total.

Primero hay que eliminar variables, y definir, fuera de tema están los caminos divergentes que hemos tomado en la vida, o el cómo hemos construido nuestra vida, somos responsables de nuestras decisiones y acciones y nos hacemos cargo de sus consecuencias, por tanto la finalidad como siempre no es convencer al otro, o tener la razón, tampoco cabe dentro de la temática la moralidad, lo bueno o lo malo, ya que cada uno puede ver las experiencias y decisiones del otro como equivocadas, pero ninguno de los dos tiene derecho a cuestionar esas decisiones, ya que ambos las hemos tomado libremente y somos responsables para bien y para mal de las consecuencias de todas ellas, por tanto eliminamos criticarnos no juzgarnos mutuamente, si no me has pedido consejo sobre algo o yo no te he pedido consejo tampoco, entonces no hay derecho para opinar sobre como construimos nuestras vidas.

La experiencia siempre ha sido debatir sabiendo que encontrar algún punto de consenso es gradual y lleva tiempo y esa es la única piedra filosofal en este camino, siempre ha sido respetar las ideas del otro sin pretender imponer una idea, si no hay acuerdo, obviamente esta es una conversación imaginaria, seguramente cuando se de en la realidad, si se da, nos sacaremos nuestros trapos sucios en cara y nos reiremos o nos pondremos serios sobre nuestros traumas en el proceso, eso sin duda.

Tú siempre dijiste, cuando utópicamente estudiabas la carrera de física, que la ciencia o en la ciencia se reduce el problema despreciando variables, o desechando variables, como el roce de un objeto en movimiento, lo antes dicho es lo mismo.

Segundo voy a plantarme en una tesis, el principio de conservación de la energía, nada se pierde todo se transforma, es en este teorema que voy a centrarme.

Desechemos variables, tú no crees en el alma, así que fijémonos en la materia, saquemos por ahora del tema la existencia del alma, tú te preguntaras como pienso dar el rodeo hasta llegar a la espiritualidad pero creo que ya ves venir por donde viene o va la cosa.

Saquemos a Dios de la ecuación también.

Saquemos por tanto todas las religiones.

Que nos queda si eliminamos todos estos factores, la materia y tú crees en la materia, esa es tu única base objetiva, tangible y real, es lo único que no pones en duda, por tanto tengo que partir por lo único en lo que crees, y ya tenemos un punto en común, crees en algo, dejando de lado el alma, dios, las religiones, aun así crees en algo y lo crees tan firmemente y tu convicción es tan pétrea en esto, que es equivalente a tener fe, la fe en sí misma no es más que eso, si despojamos la fe de contenido, lo que queda es eso, la creencia en algo con firmeza y convicción pétreas.

Y tú me dirás que tú no tienes fe y yo te diré que solo digo que es una aproximación sin contendido que definimos como fe, tu dirás que la palabra fe ya implica un contenido implícito religioso y connotaciones religiosas, entonces dale un nombre a esta creencia tuya, ponle un nombre a tu convicción absoluta en la materia, ponle el nombre que quieras, yo le llamo fe.

Bueno no hay acuerdo, en el término, avancemos.

¿Qué es nuestro cuerpo? Materia, ¿de que estamos constituidos en última instancia? De átomos, ¿cuál es la proporción de la materia en el universo? Es decir dentro de todo lo que existe en el universo ¿cuál es la proporción que ocupa la materia en él? ¿Acaso todo, absolutamente todo en el universo es materia?, ¿que hay entre la tierra y la luna? Espacio, ¿que hay entre una galaxia y otra? Espacio, ¿que hay en esta habitación entre mueble y mueble? Espacio, que hay entre célula y célula de nuestro cuerpo… espacio, se puede imaginar fácilmente el espacio hacia lo infinitamente grande, hacia lo asquerosamente grande, pero tenemos muy poca capacidad para ver el espacio y el infinito cuando miramos por ejemplo nuestra mano, vemos nuestra mano y solo vemos eso una mano, pero nos dicen que nuestra mano tiene células pero no vemos el espacio, ¿cuando vemos el espacio?, cuando damos el salto cuántico y dejamos de lado la célula y la mano y vemos que lo constituye en esencia toda la estructura biológica es el átomo, entonces, en ese punto los científicos descubren el espacio, ¿lo ven?, no, no sé si alguien ha visto un átomo, me parece que imposible verlo, porque desde el momento en que miramos un átomo cambia de posición, está en estado de onda o de partícula, al mismo tiempo, dependiendo de si hay o no un observador, es decir, un átomo está en múltiples lugares al mismo tiempo si no lo estamos mirando y está en una ubicación determinada si lo estamos mirando, no sé, tu eres el científico, corrígeme si me equivoco.

Pero ya obviemos este tema del observador, de la onda y la partícula y vamos al átomo, ya tenemos un átomo ¿y que vemos en un átomo?, que un átomo tiene electrones, pues dime tú ¿cuál es la distancia entre el electrón y el átomo?, y me dirás que es infinitamente pequeña, ¿ósea que hay poco espacio entre un átomo y un electrón? Pues que no, si se hacen cálculos la distancia entre un átomo y un electrón, si nos colocamos desde el punto de vista de ser del tamaño de un electrón,  la distancia o el espacio que lo separa del átomo equivale proporcionalmente a la distancia entre la tierra y el sol, (solo estoy aproximando para ejemplificar tú pondrás las matemáticas y el cálculo exacto), entonces ¿que hay entre un átomo y un electrón?, una gran cantidad de espacio, y si empezamos a ver solo el átomo, ¿que hay dentro de él?, mas partículas, que están separadas entre sí por unas cantidades calculadas de… espacio, digamos proporcionalmente la distancia entre nuestra galaxia y la galaxia de Andrómeda, por dar una aproximación, nuevamente… y tenemos estos aceleradores de partículas que colisionan partículas y cuando chocan salen y salen partículas más pequeñas que estaban y que no veíamos, pero que estaban ahí ¿y que se encuentra en forma muy similar?…  más espacio, y podríamos construir un acelerador de partículas que dé la vuelta al mundo y seguiríamos obteniendo más y más partículas cada vez más infinitamente pequeñas que no veíamos y que están separadas por… espacio.

Así que somos capaces de concebir el infinito mirando hacia las estrellas pero somos incapaces de entender el infinito al mirar nuestra mano, no nos cabe en la cabeza que mirando nuestra mano veamos el infinito, porque lo que veo entre mi mano y por ejemplo este teclado es… espacio.

Desde nuestra perspectiva humana y nuestra perspectiva en la escala cósmica, vemos cosas finitas, nos vemos como finitos, y un teclado es una cosa finita, pero concebir mirando la mano y ver la célula y luego ver el átomo dentro de la célula y de ahí a las infinitas partículas que  constituyen el átomo, nos es imposible concebir que somos infinitos, la realidad material que observamos cotidianamente nos dice a diario que somos finitos, somos incapaces de comprender que en la mano hay espacio, porque no lo vemos y como no lo vemos, es como si no existiera, porque utilidad práctica este punto de vista no tiene ninguno, salvo cuando llegan los matemáticos y calculan el átomo y ahí el espacio resurge, un espacio que es muy real, pero que solo se le concibe matemáticamente, es decir abstractamente, y se hace esto porque su estudio tiene utilidad práctica para la ciencia y el avance de la tecnología.

Pero para la humanidad en general concebir el infinito al mirar cada uno su mano es… confuso. ¿Cómo va a ser infinita mi mano si claramente estoy viendo que es finita, que entre mi mano y el teclado, y la mesa y el piso yo no veo nada infinito, veo cosas finitas, que están separadas por espacio.

Entonces ¿Qué es lo común que existe y conecta todas las cosas en el universo, lo que está en todos lados y define la separación entre las cosas? El espacio.

¿Haber y matemáticamente a cuanto equivale en el universo el espacio? En otras palabras cuanto espacio hay en el universo incluyendo a la materia y se calcula que el espacio constituye el 99,999…% de todo lo que existe.

Es decir que el 99,999…% de todo lo que existe está constituido de espacio, lo que nos vuelve a lo que tú  consideras “objetivo” “real”, la materia y ¿cuál es la proporción matemática de toda la materia que existe en el universo?, ¿cuánta materia hay en el universo en relación al espacio que hay en el universo?, matemáticamente hablando la materia constituye el 0,0001…% en y dentro del universo conocido.

Es decir si basamos nuestra lógica y nuestra física, en general las ciencias es porque en términos prácticos y humanos la materia es lo más fundamental, lógico y cotidiano con lo que lidiamos diariamente, pues estamos enfocados en el 0,0001…% de todo lo que existe en el universo, entonces así como cuando al calcular el movimiento de un objeto en el espacio despreciamos el roce, nuestra experiencia práctica y cotidiana nos hace despreciar el 99,999…% de lo que existe en el universo.  

Y aquí de frentón nos ahorraremos meses o años de discusiones acerca de si son verídicos o exactos estos cálculos matemáticos, o quizás se soluciones en 2 segundos, no sé, pero seguramente no llegaremos a acuerdo, o quizás sí, no sé.

Como esta es una conversación imaginaria el principio de incertidumbre indica que no tengo forma de predecir que pueda pasar o como se de en realidad esta conversación, si se da.

Entonces cambiemos de tema ¿el espacio o en el espacio se supone que no hay nada? ¿Significa que el espacio es igual al vacío?, que el 99,999…% de lo que existe en el universo está constituido de ¿nada?

Pues no, lo que llamamos vacío está lleno de… energía.

Y esto es fácil comprenderlo prácticamente… divídanse un átomo a ver qué pasa… solo que es súper contradictorio para el ser humano, porque puede entender muy fácilmente que dividiendo un átomo puede quedar una tremenda cagada por la emisión de la energía contenida, ahí lo infinitamente pequeño en términos de energía es fácil de entender, pero nos es imposible concebir que el universo y el 99,999…% que no vemos porque es espacio y por lo tanto no hay nada en el espacio en realidad este lleno de … energía.

Entonces encontramos nuestra primera contradicción en la forma práctica y cotidiana de ver la “realidad” somos incapaces de percibir el infinito al ver nuestra mano, incapaces de ver lo infinitamente pequeño, somos incapaces de percibirnos como seres infinitos, pero somos súper conscientes que en lo infinitamente pequeño de un átomo se esconde una tremenda energía, y somos incapaces de conciliar esta contradicción porque mayormente obviamos que estamos biológicamente constituidos de átomos, por tanto biológicamente infinitos y llenos de energía infinita.

Si como materia somos un 0,0001…% de todo lo que existe en el universo ¿Qué somos? En esencia ¿Qué somos?... energía.

Energía consciente. 

Señora no se enoje, vamos a tener que hablar con su subconsciente, ¿pero doctor? mi marido no va a querer venir…

Aquí hay años de discusiones por venir… como para que un científico diga que somos energía consciente, porque me pueden hablar del alma o de dios, pero acordamos que estos dos conceptos no entraban en discusión, simplemente podemos acordar o no, no lo sé, que un ser biológico como el ser humano, es energía consciente… En esencia, ósea despojándolo de todo lo que vemos en apariencia, es decir, la materia. Es como leer al revés la ecuación de Einstein de E=mc2 donde m es la materia = energía. (Ya ni me acuerdo en que consiste la formula completa)

Porque eso es lo que vemos en apariencia, no vemos la energía, no la vemos, ¿acaso brillamos?, anda a meter un dedo en el enchufe a ver dónde está la energía.

Lo que vemos y percibimos es que si no comemos nos morimos de hambre, porque si fuéramos energía no necesitaríamos comer… es decir todo el mundo practico y cotidiano, sensible y experimentable como ser humano nos niega vernos como energía, ni percibir la infinita energía que existe dentro nuestro y esto es una contradicción que nace por el hecho de que todo el filtro de la realidad pasa por el punto de vista del observador, en este caso nosotros, la humanidad.

Entonces aquí viene la gran discusión porque teniendo un punto de acuerdo en común como este, que no sé si se dé o no, yo puedo decir al científico, ¿tan difícil es verte como un ser infinito, que es energía consciente, infinita, y basándote en lo “objetivo” la materia decirme o negarme que en este punto está el puente entre tu ciencia y mi espiritualidad?

Yo no he dicho nada de mi sentido de espiritualidad aun… y no lo haré ahora, creo que este ejercicio imaginario puede llevar años, para llegar a ese punto, puedo obviar algún tipo de empatía frente a mi sentido de espiritualidad y decir simplemente en lo que creo, cosa que hago, siempre he dicho en que creo y que es lo que creo, el ejercicio es buscar un puente, una conexión, un lugar común, un enlace, para que la próxima vez que le diga a mi amigo en que creo o que es lo que percibo y vivo, no me mire con cara de ya está hablando locuras incoherentes y esotéricas.

Yo no espero que me crea, ni que tenga fe en que lo que le digo es cierto, solo puedo dar mi punto de vista sobre lo que yo vivo, es mi vivencia, y todos tenemos vivencias diferentes, así como cada uno tendrá su opinión diferente sobre un mismo aspecto de la realidad, alguna cosa, o situación, para la tranquilidad de mi amigo mi sentido de espiritualidad es solo lo que alcanzo a especular en base a lo que vivo, y todo el mundo puede especular lo que se le dé la gana sin que por eso se cree una nueva religión que es lo que le aterra a mi amigo, ya que las religiones son la más nefasta de las creaciones humanas, por las consecuencias que han desatado en la historia, pero ahora se entiende porque dejamos fuera del tema todas las religiones del mundo, no son tema aquí, porque no es mi idea debatir el papel de la religión en la historia.

Haber ¿y que significa que seamos energía consciente? Esto es súper simple, tu consciencia es de tal importancia que determina que tus átomos no se dispersen y que tú seas tú en todo momento y a cada segundo.

Aquí voy a entrar a especular mis creencias, pero basémonos en hechos físicos, el sol se mueve a una determinada velocidad, creando una elipse en torno a una estrella mayor dentro de la galaxia por efecto de la gravedad, tal y como nuestro planeta se mueve en torno al sol, el sol se mueve en el espacio, la tierra lo sigue arrastrada por su gravitación, el sistema solar se mueve en el espacio, la galaxia se mueve en el espacio, y este movimiento implica que el espacio que ocupamos en el espacio queda atrás, nunca ocupamos el mismo espacio en el universo, a medida que pasa el tiempo, por ende calculando la suma de todas las velocidades, nosotros nos percibimos si estamos en una pieza sentados, en reposo, cuando en realidad la suma de todo el movimiento es casi estar moviéndonos a la velocidad de la luz, entonces vuelta a la mano, si muevo la mano de un punto A a un punto B, en la fracción de segundos que te toma mover tu mano de A a B, todos tus átomos se estructuran y desestructuran, mueves tu mano y en ese movimiento los átomos se estructuran y desestructuran, pero tu mano sigue teniendo su coherencia como tu mano, y tus átomos son tus átomos, esta estructuración y desestructuración se produce en un espacio diferente, imagina una película, está hecha de cuadros sucesivos inmóviles, la continuidad de fotoramas da a la imagen la ilusión de movimiento de un film, ponle pausa, ¿o no? cada micro segundo transitamos por un espacio y tiempo diferente que quedo atrás en el universo, y la velocidad es tan inmensa que somos incapaces de percibir la desestructuración y reestructuración de nuestros átomos mientras nos movemos. ¿Cuál es mi especulación? Que mis átomos saben que son mis átomos y no se mezclan con los del teclado, la mesa o el piso, mantienen su coherencia por un acto de consciencia.

De hecho la explicación científica en mecánica cuántica es que no se cohesionan los átomos de mi cuerpo con los del teclado porque nada se toca, nadie toca nada, hay un espacio y una carga energética que es como una membrana que impide que yo toque la estructura molecular de otro objeto y esto impide que se desestructuren o se fusionen atómicamente las cosas con las que interactuamos.

Pero eso no explica como mantiene su coherencia el cuerpo y los átomos del mismo, en este proceso fílmico de estructuración y desestructuración dado el movimiento al que estamos sometidos.

Nuevamente la explicación científica, de parte de la ciencia que no es aceptada por la comunidad científica oficialmente pero existe, es que no sé dónde si en el centro del átomo o a nivel subatómico hay un agujero negro que genera la gravedad para mantener unida las partículas, una gravedad asquerosa, que es el opuesto a la gravedad simple que percibimos que es muy débil.

Pero eso no explica la coherencia de la materia en sus diferentes formas y estados, yo especulo que es un tema de consciencia y ahí uno entra a cuestionarse que es la consciencia y a cuestionarse bueno una piedra ¿tiene consciencia?, parece un absurdo, pero la piedra mantiene su coherencia atómica, igual que nosotros, ahí uno especula sobre la consciencia del planeta, como un ser vivo, la consciencia que pueden tener los demás cuerpos celestes, el mismo sol, ósea pasamos a cuestionarnos la consciencia en el universo en la materia y no salimos del marco humano de referencia, no agregamos nada que trasgreda el consenso de lo creíble como posible, no hablamos de inteligencia, sino de consciencia y la interconexión gracias a la unidad que da el espacio de todo lo que existe en el universo en este preciso segundo, el universo gracias al espacio sabe el estado en que se encuentra cada átomo y partícula en la red del espacio, y se retroalimenta con constante información, ¿puede ser esto llamado consciencia?

Aquí es cuando mi amigo flipa y se le cae la cara diciéndome que estoy hablando ridiculeces esotéricas, quien sabe, por ahora solo estoy especulando.

Solo espero que cuando hable de mi realidad no le entre por un oído y le salga por el otro y después me diga, a la hora después, cuando le haga alguna pregunta, me diga si, algo dijiste de unas cuestiones esotéricas… y yo le he dicho, no me estabas escuchando, y él se enoja y dice, ya estay igual que mi mujer ¿Cómo que no te he escuchado si he estado una hora escuchándote de tus cuestiones esotéricas? ¿Haber podrías repetir el contenido de lo que te dije? Porque la única forma de comprobar científicamente si alguien está poniendo atención o no es que recuerde lo que el otro dijo, a lo que el respondió… touche. (true history) 

Ósea no necesito que me comprenda, ni que me entienda, ni que me crea, lo único que pido es que me escuche y sobre todo ver si llegamos a puntos de acuerdo, porque este estado de contradicción sin resolver no es una unidad dialéctica, estamos peor que cuando éramos cabros chicos, creo que ahí es cuando uno se hace viejo, es ahí cuando uno se distancia, la curiosidad y el interés en las cosas son dos factores que nutren el dialogo, el autoconocimiento y nutren las relaciones entre los amigos y con la pareja, además la especulación es la materia prima de la filosofía, la filosofía hoy por hoy no tiene utilidad práctica, la tuvo en su tiempo, pero ya no, el área libre real de la filosofía es la especulación y estamos claros que la filosofía no es ciencia, ni tiene porque serlo.

A mí me da lo mismo que mi amigo me escuche o no, siempre será mi amigo, así que no se si esta conversación se dará o no, por eso es una conversación imaginaria y le llamo “el viaje a la semilla” porque es el título de un poema que escribió mi amigo cuando éramos cabros chicos, cuando escribía cuentos, cuando filosofábamos, cuando no estaba atado a una concepción del mundo, sino que estaba deseoso de comprender el mundo y de crear una concepción del mundo, no era la idea volverse esclavo de su creación sino liberarse del mundo preconcebido que nos querían inculcar para influir en nuestros valores, gustos y estilos de vida, libertad era la búsqueda final inconsciente, es hora de despertar y tomarse la libertad de ser cada día más conscientes.

En resumen, para mí, como punto de partida, somos energía consciente e infinita, esta es la puerta de entrada para tratar de dar un nexo con la ciencia, nada se pierde, todo se trasforma, pero es solo un grano de arena de mis concepciones espirituales, mis creencias, mis experiencias o mis vivencias y le hablo a tu razón aunque nunca me des la razón, porque yo perdí la razón hace harto tiempo ya y no me interesa tampoco tener la razón, la descarto(es).

Las palabras quedan, viste che, si nunca hablamos del tema, algún día quizás leas esto. 


May the forcé be with you.

Buda, ¿te puedo hacer llegar una de esas representaciones geometricas y complejas del universo?

Mandala (*envíala) 

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