Dentro de esta serie de publicaciones relacionadas al ecosistema de las criptomonedas, el tema no resuelto por los gobiernos del mundo es clasificar a la principal criptomoneda, el bitcoin, si no pueden definir con uniformidad ¿qué es un bitcoin?, es imposible, como se ha dado, que se le pueda aplicar algún tipo de regulación, aun cuando han tratado, sin coincidir, no es mi intención aclararle las dudas a los reguladores, ya que no solo no entienden que es el bitcoin, sino que por el concepto fundacional por el cual fue creado en 2008 tiene por finalidad la descentralización del dinero globalmente, por tanto las plataformas de criptoactivos que sean reguladas en un país, pueden perfectamente migrar a otro Estado o lugar del mundo que las acoja más favorablemente y seguir operando sin problemas frente a un estado que ponga frenos o trabas. Es tratar de ponerle diques al mar.